Si lo repites muchas veces te lo acabarás creyendo
¡Qué va! Si lo repites muchas veces acabarás siendo cansino.
¡Qué va! Si lo repites muchas veces acabarás liándote y diciéndolo al revés.
¡Qué va! Si lo repites muchas veces acabarás siendo tu propio eco.
¡Qué va! Si lo repites muchas veces acabarás más tarde.