Estos son mis campeones.
Son preciosos, no me lo pueden negar. Y señoras y demás con ellos se patina divinamente. No pienso cambiar lo de divinamente. Me la suda lo que opinen ahora mismo. Son precisos y son míos.
Tarde 2 horas en decidirme, me los probé 3 veces, patine en la tienda e hice un par de chorraditas y finalmente, desobedeciendo a mi contable, me los compré.
Fue todo un espectáculo, me dio un ataque de ansiedad, uno de angustia un ataque de histeria. Todo en cuestión de segundos. Claro con estos patines uno va acelerado.
¡Y si! la primera noche dormí con ellos puestos.
Eso me recuerda a Boogie Nights.
Posteado por Jake - 4 de Marzo 2008 a las 06:23 PM