Somos unos alucinados. Ayer en la enésima-reunión pre-interailera., nos alucinamos un poco. El litro de cerveza está a 0.57 céntimos de euro. Sed no pasaremos, así que las pastillas potabilizadoras se van a la mierda.
¿Por qué tanta reunión? Porque B tiene una terrazica chulísima. Porque somos unos alucinados. Porque el agosto es muy duro en el asfalto y porque B tiene una terrazica chulísima.
Y lo peor es volver al crudo mundo real lleno de estrés, trabajo, marrones y sudores. Ayer repasando lo mejor de cada lugar descubrimos que al llegar a Budapest (¿Budapest o era Bucarest? bueno seguro que no era Sofía) están de fiestas y hay un montón de conciertos y actos culturales por la patilla. Y que hay unos balnearios que tienen precios irrisorios. Así que como buenos catalanes que somos estamos la mar (la mar negra) de contentos.
Por supuesto al llegar allí, nos estafaran, robaran, maltrataran, nos pasaran todo tipo de calamidades, perderemos todos los trenes y vuelos. Pero no pasa nada porque estamos de interail-rail-rail.