Soy una desgraciada. En plena semana floja, y va y ayer y salgo 2 horas más tarde. Porque el único cliente que tenía esta semana tiene un problema con el concepto "fecha límite".
Lo peor es quedarte más rato sin tener la certeza de que recibirás los documentos que estás esperando. Lo peor, que los clientes no solo creen que siempre tienen la razón sino que además esperan que las leyes cambien para acomodarse a ellos en cada ocasión. Lo peor, que se sienten indignados por la presión que ejercemos para cumplir con la legalidad. Lo peor, la falta de educación, nos pagan para que hagamos el trabajo no para ser insultados. Si ellos incumple no pasa nada, pero si tu incumple nos vemos en los tribunales.
Estoy muy harta de esta bajada de pantalones constante, el protocolo, que siempre nos dicen que deben ser nuestra Biblia, dice que los plazos deben cumplirse a rajatabla. Y que no deben hacerse excepciones ni favoritismos. El día a día, me ha enseñado que aquí el que es más cabrón se le tarta mejor. Y al pobre cliente que cumple con todo y a tiempo, se le mindundea. Con el cariñito que les tengo yo a mis "sospechosos habituales".
Este mundo es para cabrones. Y por mucho que me joda reconocerlo yo no estoy dentro de esa elite. Gracias mamá, por enseñarme a ser buena persona. ¡De verdad, gracias!
<__trans phrase="Posted by"> apio <__trans phrase="at"> 25 de Marzo 2011 a las 07:18 AMDe nada, hija.
Ahora cómete las cocretas.
Posteado por Jake - 25 de Marzo 2011 a las 09:43 AMEs que se me hacen bolaaaaaaaa.
Y me duele la panchulina.
Pues te las comes una a una.
Y como no te las comas, te dolerá la cabeza del sopapo que te meteré.
Posteado por Jake - 25 de Marzo 2011 a las 03:24 PMEso ha dado miedo!
Posteado por apio - 25 de Marzo 2011 a las 06:25 PM