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5 de Julio 2008

Viejos: esos arrugados holgazanes

No me gusta la gente mayor. No es de ahora, jamás me gustaron. Soy una persona tolerante, a mi me la suda todo y todos. Excepto por ese colectivo. Los viejos. Los viejos son como las lentejas. No, me gustan pero alguna vez tienes que hacer tripas el corazón y comértelas. No es que yo me vaya comiendo viejos. Era un símil o una metáfora o una rotonda. El hecho es que no me como a los viejos ni a las viejas, que quede claro.

Claro que si por alguna razón yo ahora me viera condenada al canibalismo. Me comería solo a viejos. ¿Que quieren? No son productivos ¡y encima ahora se niegan a cuidar los nietos! Pero si la función de los viejos es cuidar de los niños mientras los padres cazan y recolectan. Bueno si lo actualizamos, mientras los padres hacen horas en el curro, para poder pagar los medicamentos que los yonkarras de la tercera edad toman de manera compulsiva.

No solo tienen poca paciencia y malas maneras y se creen con derecho a todo sinó que encima son unos putos vagos. ¡Venga ya! Que hagan como los elefantes y cuando ya sean un lastre para el conjunto se retiren y se vayan a morir.

¿Adivinen a quien le han jodido los planes del finde por que los abuelos no querían hacer de canguros?

<__trans phrase="Posted by"> apio <__trans phrase="at"> 5 de Julio 2008 a las 01:28 PM


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