Estaba en la oficina y veía a la gente mover los labios y hacer gestos. Incluso oía un ruidito que otros hubieran tachado de conversación. Me miraban y yo asentía o abría muchos los ojos como si aquello que me estuvieran contando me sorprendiera. Justo como hago cuando voy a visitar a mi madre.
Los emails entraban en la bandeja de entrada, les echaba un rápido vistazo y los cerraba.
Incluso llegué a coger un par de llamadas.
Si, señores, yo era funcionaria del Estado.
Por desgracia no lo soy y cuando he vuelto a la realidad me he comido un montón de broncas por haber pasado de los emails, las llamadas y de mis compañeros y jefes.
¿Y si fuera esto el sueño? ¿Y si yo realmente fuera funcionaria del Estado? ¿Y si toda mi vida fuera un sueño de Antonio Resines?
Imagínense que ustedes estudiaron una carrera durante unos 5 años. Imagínense que incluso llegaron a licenciarse de esa carrera. Imagínense que hicieron un master al acabar esa carrera, simplemente porque todo el mundo lo hace. Imagínense que después de todo eso trabajan en algo que no está relacionado directamente con esa carrera que estudiaron. Imagínense que por casualidades del destino y por motivos meramente laborales tienen que contactar con gente que estudió esa misma carrera que ustedes y ese mismo master que ustedes pagaron (porque los masters, se pagan, y se pagan caro, sino que se lo pregunten a Rafa Nadal). Imagínense a hora la cara de "tú estás de guasa ¿no?" cuando ese individuo les suelta una supina gilipollez que ni un estudiante de primer año de carrera tendría bemoles de soltar.
Imagínense que tienen que morderse la lengua porque no van en calidad de conocedores de la materia, sino simplemente en calidad de bulto de carne (en mi caso un bulto precioso de carne, por supuesto). Imagínense que le hubieran remarcado varias veces que se mantuviera en silencio a menos que se le dirigiesen directamente a usted. Imagínense que ustedes son personas, que tienen esas cosas raras, que les gusta que les traten con una mínima deferencia.
Así que no se escandalice nadie si ven al bulto de carne se queda sentadito, calladito y con cara de estar deleitándolo. Ni Elton John, en sus años más locos, gozaría tanto de una enculada como lo va a disfrutar una hipotética servidora.
Y ya lo dije el 30 de noviembre del 2011.
Hoy fue el día, el tan temido día. Hoy 27/01/2012 se fue todo al carajo. Y señores y señoras tuve "el honor" de tener asientos en mi primera fila.
Ahora mismo estoy echa una mierda. No sé si reír o llorar. Y hoy cuesta más que nunca ser irreverente, gamberra y alocada. Y me repito eso de "el espectáculo debe de continuar". Pero como dice Tim Minchin no hay nada peor para la Comedia como los grandes estadios. Y ahora mismo me siento con payaso cutre ante un público enfurecido en el mismísimo estadio de Wembley.
No está mal, el post de hoy, después de tanto tiempo y va y me sale una mierda sensiblera bien digna del más odioso de los EMOS que pululan por los chats de suicidio colectivo. Pero no se engañen en todo este rato solo he estado pensando si estaría escribiendo bien Wembley o no. No me sale del todo bien eso de ser profunda, ¿que se le va a hacer?
El comercial se pasea con su sudadera y sus zapatillas trilladas cabizbajo por la oficina.
El British siempre me dice que tenemos suerte de vivir en una sociedad donde se te permite ir a la oficina con zapatillas de deporte. A mi me sorprende cuando dice cosas como esa. Las zapatillas de deporte son prácticas y cómodas. No entiendo la relación entre la eficiencia de un trabajador y su calzado. Así que nuestro comercial se pasea con su sudadera y sus zapatillas trilladas cabizbajo por la oficina y nadie se escandaliza. Lo único que queremos es que consiga nuevas y suculentas cuentas. Y si lo hace por mí como si mañana entra con pies de pato en la oficina.
¡Oye, que me he quedado sin hojas en el almanaque!
Los propósitos del 2012 son los mismo que los de los del 2011 y los del 2010 y los del 2009 y los del...¿ en serio creen que el voy a hacer una cuenta a tras hasta el primer año en que hice propósitos de año nuevo? Si es así, es que no han pasado mucho por aquí. Lo cierto es que ni yo he pasado mucho por aquí. Pocas ganas de compartir. Pocas ganas de escribir. La crisis. Y que no me salía del coño.
Pero eso no quita que no les desee un buen 2012.
Feliz 2012 a todos y a todas.